¿Te gusta lucir diseños originales y divertidos en tus uñas? No hace falta ser una experta en nail art para conseguir acabados sencillos y novedosos. En nuestro artículo de hoy, te enseñaremos a decorar tus uñas con sal (esta técnica también recibe el nombre de «uñas cristalizadas»).


Es una forma económica y fácil de sorprender a tus amigas con una manicura exclusiva. El método es muy rápido, casi como un juego de niños. Además gastarás muy poco en los productos empleados pues sólo necesitas un esmalte incoloro, otro esmalte de color y sal fina de mesa (tres cosas que tenemos casi todas las chicas que solemos pintarnos las uñas). ¡Vamos a ello!

Paso a paso:

En primer lugar, debemos crear una base sobre la que vamos a trabajar. Aplicaremos una primera capa de esmalte protector y dejaremos que se seque durante unos minutos.

Una vez estén bien secas, extenderemos sobre toda la superficie de la uña una capa generosa de laca de uñas de color.

¡No dejes que se seque todavía! Ha llegado el momento de cristalizar nuestras uñas con sal. La aplicaremos con pequeños pellizcos tratando de que la textura quede lo más uniforme posible. Como imaginas, no podemos pintar las dos manos a la vez porque la sal se quedaría adherida a las uñas de la mano con la que la estamos agarrando y estropearía el acabado final con feos pegotes. Para evitarlo, pinta primero una mano, texturiza las uñas con sal y cuando se haya secado, haz lo propio con la otra mano.

Si te fijas, la sal es blanca y al espolvorearla sobre un esmalte de color oscuro, se ven los puntitos (no sucede así si hemos elegido una laca de uñas de color blanco, marfil o rosa palo). No te preocupes. Espera a que se seque y cuando ya no estén pegajosas, extiende una segunda capa de pintauñas, pero esta vez muy fina. La primera capa nos ha dado la textura cristalizada. Ahora solamente tendremos que preocuparnos de unificar el color.

Cuando la segunda capa de esmalte se haya secado, la sal quedará totalmente invisible y solamente veremos la textura granulada (como en la foto). Para conseguir un acabado brillante y más preciosista, aplicaremos ahora una fina capa de brillo incoloro.

Si parte de la sal se ha rebasado, puedes retirar los pegotes de los laterales usando un palito de madera de naranjo.

¡Tus uñas cristalizadas con sal ya están listas!

Recuerda que puedes emplear esta misma técnica usando semillas, arena o cualquier material con textura en granos (aunque no todos son fáciles de manejar o tienen la misma adherencia).

Si quieres rizar aún más el rizo, puedes conseguir diseños más complicados cubriendo distintas partes de la uña con cinta adhesiva para ir trabajando con diferentes tonos de esmalte o bien colocar la sal únicamente en las puntas. Pero esta decisión depende ya de tu creatividad y de tu gusto personal.