¿Eres una enamorada de la cosmética natural y te encanta preparar tus propios jabones y geles de ducha usando ingredientes ecológicos? Hoy te traemos una receta un tanto laboriosa pero muy económica y original: un jabón de leche y hierbaluisa que dejará tus manos suaves e hidratadas al instante.


Al tener una composición cien por cien orgánica, no reseca tu piel ni contamina el medioambiente.

Nuestras abuelas solían valerse de estas fórmulas para elaborar jabones artesanales y cosméticos destinados a la higiene corporal. En nuestros tiempos, resulta más cómodo y accesible utilizar los productos de composición química que adquirimos en perfumerías y centros comerciales. Sin embargo, lo natural sigue teniendo sus adeptas ya que los jabones ecológicos están libres de parabenos y sustancias que pueden irritar la piel o hacer que se vuelva hipersensible.

Para elaborar este jabón necesitarás:

  • 1 litro de aceite de oliva o de girasol
  • 200 gramos de sosa caústica
  • 1 litro de leche de vaca
  • Un buen manojo de hojas de hierbaluisa

Paso a paso:

Recolecta la hierbaluisa en un día soleado y separa las hojas de los tallos. Enjuágala varias veces en agua fresca para que quede bien limpia y sin restos de tierra, insectos, etc.

Pon una olla a hervir con un litro de leche de vaca. Una vez que comience a hervir, agrega las hojas de hierbaluisa y deja que se cuezan aproximadamente 15 minutos a fuego lento. Cuela la infusión y viértela con cuidado en un caldero o en un cubo de plástico.

Añade a continuación un litro de aceite de oliva o de girasol y remueve la mezcla.

Por último, agrega los 200 gramos de sosa cáustica con mucho cuidado de no quemarte ya que al entrar en contacto con la mezcla, entrará en ebullición. Verás que la infusión de leche y hierbaluisa toma entonces un color amarillento. Debes remover la mezcla siempre en el mismo sentido hasta que se espese (aproximadamente media hora, si has tomado bien las medidas). Esta parte resulta bastante cansada y tediosa, pero si dejamos de remover la pasta no tendrá una textura homogénea y el jabón no quedará bien.

Una vez que se forme una masa consistente de color marrón oscuro, retiraremos un poco los restos de agua y la colocaremos sobre un molde. Debes esperar dos días para que se seque y se solidifique. Pasado este tiempo, puedes cortar las pastillas de jabón, pero no todavía no es recomendable usarlo. Guarda las pastillas en un lugar seco y protegido de la luz (por ejemplo, una alacena) y espera aproximadamente un mes antes de usarlas.

Si te ha gustado este jabón artesanal, la próxima vez que lo prepares puedes aumentar las medidas de cada ingrediente de forma proporcional para obtener más pastillas.