¿Notas que tu cutis ha tomado una apariencia mate, apagada y sin vida? La pérdida de luminosidad en el rostro no sucede de la noche a la mañana. En ella concurren muchos factores tanto exógenos (hábitos de vida y clima) como endógenos (envejecimiento y cambios hormonales).


No existe una fórmula secreta de la eterna juventud, pero podemos conseguir que nuestra piel luzca más joven si luchamos contra los agentes externos que aceleran los procesos de envejecimiento celular y, al mismo tiempo, favorecemos su regeneración dándole a nuestra epidermis aquellos nutrientes que necesita para reparar las fibras de colágeno y elastina deterioradas, tanto por vía tópica utilizando la cosmética como interna cuidando nuestra alimentación.

Facilita la oxigenación celular

El tabaco, además de ser nocivo para tu salud, entorpece la microcirculación a nivel celular impidiendo que la piel se oxigene correctamente. En los primeros años de tabaquismo es normal que el cutis se vea más apagado y sin vida. De no abandonar pronto este mal hábito, puede acelerarse la aparición de arrugas prematuras y líneas de expresión.

Del mismo modo, también es importante limpiar diariamente nuestra cara sin olvidarnos de retirar el maquillaje antes de ir a dormir. Si no te desmaquillas, los poros podrían infectarse al llenarse de suciedad, dando lugar a espinillas y brotes de acné. Pero este no es el único inconveniente: los residuos químicos del maquillaje se mezclan con las células muertas y la grasa segregada por la propia epidermis formando una densa capa que impide su oxigenación natural. Una piel que no respira no se regenera completamente y envejece más rápido de lo habitual. Por este motivo es muy importante no descuidar nuestra higiene facial.

Una o dos veces a la semana, sería conveniente también que realizases una exfoliación para deshacerte de las impurezas más incrustadas, estimular la microcirculación y los procesos de renovación celular.

La hidratación es la clave

Con la edad perdemos parte de las partículas hidrolípidas que se encuentran en la epidermis y protegen las fibras de colágeno y elastina. Como consecuencia la piel tiende a resecarse y aparecen las primeras líneas de expresión que irán acentuándose con el paso de los años. Para relentizar este proceso al máximo es imprescindible evitar que tu cutis pierda agua. Utiliza una crema hidratante de día y otra nutritiva para la noche y trata de beber al menos dos litros de agua diariamente, pues el principal aporte de hidratación debe venir desde el interior.

Protégete del sol

Es el principal responsable del fotoenvejecimiento de la piel: manchas, arrugas y adelgazamiento progresivo de la epidermis son algunas de las consecuencias de las exposiciones prolongadas y sin protección. Utiliza diariamente una crema con un FPS mínimo de 30 (incluso en invierno) y evita las exposiciones prolongadas de más de 15 minutos, sobre todo en las horas del día en las que los rayos ultravioleta tienen mayor incidencia.

La zona del contorno de ojos es especialmente sensible. Sería conveniente utilizar unas gafas de sol para evitar la aparición de las indeseadas patas de gallo.

Dieta rica en antioxidantes

Los antioxidantes son moléculas capaces de retardar o prevenir la oxidación de otras moléculas. Las reacciones de oxidación pueden producir radicales libres que comienzan reacciones en cadena que dañan las células. Los antioxidantes terminan estas reacciones quitando intermedios del radical libre e inhiben otras reacciones de oxidación oxidándose ellos mismos.

Incorpora en tu mesa alimentos como el aceite de oliva, el brócoli, el jenjibre, el perejil, los tomates, la cebolla o el té verde para mantener tu piel joven y hermosa.

Los cítricos son ricos en vitamina C. Un zumo de naranja o pomelo por la mañana, nos recarga de energías, reforzando nuestro sistema inmunológico a la vez que nos ayuda a conseguir un cutis más bonito y luminoso. ¡Apúntate a los zumos naturales!

Esperamos que nuestros consejos de hoy para revitalizar tu piel te hayan gustado y te sean de utilidad. Es cierto que ya hemos tocado anteriormente este tema pero nunca está de más recordar estos sanos consejos y tenerlos presentes.