Es un hecho que en España y en otros países mediterráneos, hacer top less en la playa ha pasado de ser una moda para convertirse en algo habitual. Una piel bronceada y sin marcas de bikini luce mucho más atractiva y sexy. Sin embargo este color dorado no siempre es sinónimo de salud.


De todos es sabido que exponerse al sol sin protección solar es una de las principales causas del fotoenvejecimiento y del cáncer de piel. Lamentablemente, no siempre estamos totalmente protegidas aun usando cremas fotoprotectoras. La piel de los senos es más fina y sensible que la del resto del cuerpo, por lo cual es también más propensa a sufrir el daño solar provado por los rayos ultravioleta. Debido a su escasa densidad, éstos agreden profundamente las fibras de colágeno y elastina situadas bajo la epidermis y que son las encargadas de garantizar la firmeza y flexibilidad de nuestra piel. Hacer top less de forma continuada es una de las causas de que mujeres aun muy jóvenes tengan el pecho caído o flácido.

Por este motivo, te recomendamos limitar tus baños de sol en top less a 15 minutos diarios y nunca entre las 11:00 y las 17:00 horas ya que en este momento la incidencia de los rayos UVA es mayor.

La piel de la areola y del pezón es más sensible y se deshidrata con facilidad. Te recomendamos que uses bloqueadores con pantalla total en esta zona (para el resto del seno aplícate por lo menos una con FPS 50).

Por último, recuerda que cada vez que te sumerjas en el mar perderás la crema fotoprotectora y tendrás que renovarla, aunque si hiciste caso a nuestro primer consejo, no deberías permanecer en top less más de 15 minutos.

Y, por supuesto, nunca te untes aceites corporales para acelerar el bronceado en tus senos, ¡es muy perjudicial!