Es una intervención de cirugía estética que no suele entrañar complicaciones serias siempre que sea realizada por un cirujano profesional y que el paciente goce de buena salud. Aún así, es importante seguir una serie de cuidados postoperatorios para evitar infecciones y que el resultado sea el esperado.


La presencia de edema irá disminuyendo hasta la sexta semana, así como la hinchazón alrededor de los ojos.

Es importante que:

  • Mantegas la cabeza y el tórax elevado a la hora de dormir y evites ladearte en la cama.
  • Te laves la cara con agua fría a partir de las 24 horas, con cuidado de no mojar el apósito.
  • Te mantengas hidratada y comas alimentos suaves y fríos durante las primeras 48 horas.
  • Limpies las fosas nasales con suero fisiológico (después de retirado el apósito) y apliques la pomada bactericida que te recete tu cirujano.
  • Puedes aplicarte vendas empapadas en manzanilla helada sobre tus ojos si están inflamados.
  • Evita los movimientos bruscos de la cabeza, sonarse fuerte o estornudar.
  • No te expongas directamente al sol durante las seis primeras semanas.
  • No uses lentes de contacto durante la primera semana y tampoco gafas hasta la tercera semana.