Las faldas plisadas son una de las prendas más románticas y femeninas que existen, en cualquiera de sus largos, estampados o colores. Puedes conjuntarlas de formas muy diferentes ya sea para adaptarlas a un look casual o para ir más elegante.

Este verano se llevan las faldas plisadas de gasa o telas livianas, especialmente los diseños en colores fuertes, con estampados originales o pequeños apliques en cuero o terciopelo.

A la hora de comprar una falda plisada la estatura es un factor importante. Si eres bajita, opta por un diseño midi (las faldas muy largas sólo quedan bien a las chicas altas). Además, debes tener en cuenta la anchura de las caderas ya que el corte con tablas da mucho volumen a la silueta. Si tienes las caderas voluminosas, es preferible optar por un diseño en colores oscuros y evitar los estampados de gran tamaño. El ancho del pliegue también es importantísimo ya que cuanto más angosto sea el plisado más estilizará tu silueta.

Existen muchas posibilidades de conjuntar una falda plisada para adaptarla a tu estilo.

En verano quedan genial con cualquier top básico y unas sandalias.

Si te gustan los looks vintage, te recomendamos elegir una falda plisada de corte midi y combinarla con una camisa elegante.

Para salir de noche, puedes combinarla con una prenda transparente o algo de cuero ¡conseguirás un toque rockero y moderno muy juvenil!

Y para todos los días, te aconsejamos apostar por un look romántico y favorecedor. Opta por una falda plisada en tejidos volátiles con colores alegres o estampados llamativos. Puedes combinarla con botas de media caña y tus accesorios favoritos.

¡Anímate a crear tu propio estilo!