Además de sus muchas propiedades terapéuticas, los aceites esenciales también pueden ayudarnos a suavizar la piel, regenerar los tejidos o evitar la aparición de estrías.

Casi todos los aceites esenciales poseen vitaminas y nutrientes indispensables para el cuidado de la piel. Hoy haremos una pequeña selección de cinco aceites muy valorados en cosmética por sus propiedades dermatológicas:

Aceite esencial de incienso

Fue utilizado desde tiempos muy remotos por los egipcios y los persas paa rejuvenecer la piel y mejorar la apariencia de las arrugas. Es un potente regenerador celular que combate los primeros signos del envejecimiento.

Aceite esencial de lavanda

Beneficioso para todos los tipos de piel. Basta con añadir unas gotitas de este aceite a tus cremas y lociones de uso diario para lucir una piel suave y radiante.

Aceite esencial de salvia

Su alta concentración en antioxidantes combate la aparición de las primeras arrugas y retrasa el envejecimiento. Mezcla una gotita de aceite esencial de salvia con tres o cuatro gotas de aceite de almendras dulces y aplícalo todas las noches antes de acostarte. ¡Verás la diferencia!

Aceite de mandarina

Gracias a su alto contenido en vitamina C combate la acción dañina de los radicales libres regenerando las células de colágeno y elastina.

Aceite esencial de geranio

Es antiséptico y antiinflamatorio. Ideal para la piel seca y con eczema, pero también para las pieles grasas y con tendencia al acné ya que mantiene limpios los poros y calma la irritación.

¿Has empleado alguna vez estos aceites esenciales? Como siempre os recordamos, debéis tener cuidado a la hora de manipularlos. No se pueden ingerir ni aplicarlos directamente sobre la piel sino que deben diluirse antes en otro aceite de base vegetal como el aceite de almendras, el aceite de semillas de uva o el aceite de jojoba.