cicatrices

Las cicatrices son uno de los problemas más difíciles de solucionar a nivel cosmético. Dependiendo de su profundidad y del lugar del cuerpo donde hayan aparecido se hace más o menos complicado ocultarlas.
Su aspecto dependerá en gran medida de los cuidados que les hayamos dispensado durante el proceso de cicatrización. Una vez que éste ya ha concluido, eliminar las manchas es posible pero es una labor mucho más costosa y que requiere bastante tiempo. Por este motivo, no está de más que recuerdes estas recomendaciones cuando te hagas una herida:

  • Debes limpiarlas minuciosamente con agua y jabón inmediatamente después de producirse para evitar que los microorganismos se infiltren en ellas provocando una infección. Si tienes a mano algún tipo de desinfectante o antibiótico, úsalo.
  • Si consideras que la herida reviste alguna gravedad o se ha producido en una parte del cuerpo delicada (rostro, senos, etc.) acude a tu centro de salud.
  • Cierra las heridas correctamente: algunas heridas necesitan de puntos de sutura mientras que otras pueden curarse con un vendaje de compresión. Cuanto más cerrada haya estado la herida la cicatriz que deje será menos visible.
  • No te rasques las costras. El organismo utiliza las costras como un sistema de autodefensa para evitar que los microbios se introduzcan en la herida y que ésta se infecte. Si nos las arrancamos además de incrementar el riesgo de infección, la cicatrización se hará más difícil pudiendo quedar manchas oscuras en tu piel.
  • No mojes las costras. El agua caliente del baño puede reblandecerlas y hacer que se caigan, entorpeciendo el proceso de cicatrización.
  • Las cicatrices importantes deben humectarse con aceites o cremas antibióticas que te recete tu médico para evitar posibles infecciones y acelerar la curación de las mismas.
  • Evita el contacto con el sol. Recuerda que una vez que una herida ha cicatrizado, la piel nueva que aparece en su lugar es mucho más fina y delicada y contiene un nivel de melanina inferior a la del resto del cuerpo por lo que se mancha fácilmente ante las exposiciones solares prolongadas. Si vas a tomar el sol, deberás usar una crema con protección pantalla total sobre esta área.
  • Cuida tu alimentación, ya que una nutrición insuficiente reduce la producción plaquetaria y hace que las heridas tarden más en sanarse. Alimentos como los higos, las berenjenas, las cebollas, los melocotones, el apio, las peras o las patatas son ricos en cinc, una sustancia con propiedades antibacterianas que previene que se produzcan infecciones.
  • El uso tópico de plantas medicinales como el aloe vera también favorece la cicatrización ya que posee propiedades antiinflamarias,antisépticas y bactericidas, además de tener un gran poder de hidratación y regeneración celular. Otras plantas como el geranio, el tomillo o la manzanilla también poseen virtudes antisépticas y calmantes y son muy útiles para elaborar tónicos y lociones de uso externo.
  • Si las cicatrices no son recientes y han dejado marcas, aun es posible tratarlas con peelings, dermoabrasión, inyecciones de colágeno o cirugía láser. Tu dermatólogo te indicará la solución más adecuada en tu caso.