manchas del tinte


¡Qué emoción cuando nos teñimos el pelo en casa de ese color que tanto nos gusta! Los tintes caseros nos permiten lucir el look que nos favorece todo el año sin tener que pagar costosas sesiones de peluquería cada mes. Además, cada vez son más fáciles de aplicar. Sin embargo, toda nuestra pericia y destreza no pueden evitar que de vez en cuando metamos la pata y hagamos un estropicio. Mancharse la frente, las orejas o incluso parte de la cara es más habitual de lo que imaginas. Basta un pequeño descuido o un mechón suelto para que la «chapuza» se produzca.

Si quieres prevenirlo, lo mejor es, antes de teñirte, recoger bien tu melena con una pinza o coletero y untar una capa de vaselina por todo el marco del rostro (frente, sienes y orejas); de esta forma, en el caso de arrastrar sin querer parte del producto, podrás retirarlo sin problemas con la ayuda de un cleenex.

Pero si el desaguisado ya se ha producido, no sirve de nada lamentarse. Gracias a estos sencillos tips conseguirás remover sin problemas las antiestéticas manchas del tinte en tu piel. Todo dependerá de si éstas están secas o de si son claras u oscuras. Toma nota:

¿Cómo eliminar las manchas del tinte?

  • Si la mancha es reciente (el tinte está fresco) y es de color claro, entonces podrás quitarla sin problemas con ayuda de tu leche limpiadora habitual o de un algodoncito empapado en zumo de limón.
  • También puedes mezclar un poco de tu champú habitual con alcohol de 90º y frotar delicadamente la mancha con cuidado de no entrar en contacto con la zona de los ojos.
  • Si las manchas están secas, puedes aplicarte un poco de pasta de dientes blanqueadora sobre la zona y esperar 5 minutos. Luego, retírala con ayuda de un pañuelo de papel y abundante agua tibia.
  • Las manchas más complicadas suelen desaparecer fácilmente si mojamos nuestros dedos en agua y luego los pasamos por un poco de ceniza de cigarrillo (obviamente fría). Debemos restregar con suavidad el área afectada y cuando la mancha desaparezca por completo, lavarla con abundante agua fría. Si tu piel se ha irritado durante el procedimiento, extiende un poquito de crema hidratante para reparar la epidermis.