Aunque en los tiempos que corren no todo el mundo puede permitirse comprar cosméticos caros, nos ha parecido interesante dedicar nuestro artículo de hoy a la cosmética de lujo o alta cosmética; en principio, porque todas nos hemos hecho alguna vez esa pregunta de «¿por qué esta crema o esta loción es tan cara?». Cuando acudimos a un supermercado o a unos grandes almacenes, casi todas las cremas suelen moverse en el rango de los 3 a los 50 euros. A partir de este precio aproximado, ya podríamos decir que estamos ante un producto de cosmética de lujo. Incluso, algunas veces te habrás asustado al ver que en perfumerías especializadas, algunos cosméticos alcanzan los 400 – 600 euros. ¿Por qué tan caros? ¿qué hace especial a la cosmética de lujo?


En principio, y en relación al último ejemplo que pusimos, no existe ningún componente que justifique que una crema cueste tanto. Los cuidados que nos ofrece la cosmética son principalmente preventivos y también pueden mejorar el estado inicial de nuestra piel, pero no existen los milagros. Ninguna crema tiene los efectos de un lifting quirúrgico ni conseguirá que te veas como las bellezas photoshopeadas de las revistas que nos venden el cuento de la eterna juventud a golpe de retoque digital.

Ahora bien, también debemos reconocer que hay cosméticos de mejor calidad que otros, y la calidad se paga. No nos puede ofrecer lo mismo una crema de 3 euros que una de 20 euros u otra de 60. Los cosméticos demasiado baratos suelen incluir en su composición derivados de la petroquímica: siliconas, glicerinas y parabenos que pueden hacer que nuestra piel se irrite o se vuelva hipersensible a otros factores desencadenando reacciones alérgicas. Conviene identificar los nombres de algunas de estas sustancias y tratar de evitar las más nocivas. Que una crema sea más cara no excluye que esté libre de parabenos pero por lo general, suele incluir activos de mayor calidad.

Otras cualidades de este tipo de cosméticos son:

Untosidad

Una buena crema suele tener una textura rica y untosa. Si sus componentes son principalmente orgánicos, tus poros la absorberán de inmediato y podrás vislumbrar los resultados en cuestión de minutos: una piel más luminosa y con vida. Las cremas de mala calidad, en cambio, contienen siliconas y glicerinas que los poros no pueden absorber, de modo que el producto permanece durante horas en la superficie, «ensuciando la piel» y convirtiéndose en el pegamento ideal para la polución ambiental y las bacterias. Aunque al momento notes tu cutis hidratado, si las usas a menudo el poro tiende a obstruirse y a aparecer puntos negros y espinillas.

Investigación

Los productos de alta cosmética suelen pasar más pruebas de laboratorio para asegurar su efectividad hasta en un 87% de los casos.

Presentación

Este tipo de cosméticos suelen ir acompañados de un packaging de lujo, cuidado en detalles y diseño y, por supuesto, perfectamente funcionales para garantizar que el producto no se estropee si se le da un buen uso.

Podríamos concluir en que pese a que los boom publicitarios se pagan, cuando nos encontramos con un cosmético caro, no todo es marketing. Lo ideal es familiarizarse con los nombres de las sustancias más utilizadas en cosmética (en nuestro blog puedes encontrar muchos artículos al respecto) y comparar productos. Utiliza también el sentido común que nos dice que aunque una crema pueda ser cara, tampoco se justifican los desorbitados precios de ciertos cosméticos.