Cuando llega el verano, dedicamos más horas a las actividades al aire libre, sacrificando parte del tiempo que solíamos emplear en hacer ejercicio. Todo ello, unido al hecho de que consumimos más helados, tapas o bebidas gaseosas, se traduce al final de las vacaciones en unos kilillos extra que no deberían inquietarnos. Pero, con todo, si lo deseas, también puedes ponerte en forma en la playa o piscina al tiempo que te diviertes.


Los deportes del verano son en su mayoría de tipo aeróbico. Esto significa que nos vienen de maravilla para bajar de peso, tonificar nuestro cuerpo y motivarnos (lo mejor de todo es que pueden practicarse en equipo).

Los más conocidos son:

  • Volei playero: ¡te ayuda a quemar hasta 423 calorías por hora!
  • Buceo: hay dos modalidades, el apnea o «sin respiración» donde no se necesita equipo y el scuba donde se requiere tanque de oxígeno. En todo caso siempre debes practicarlo acompañada de un experto y mantenerte en áreas seguras.
  • Waterpolo: quemarás hasta 529 calorías por hora.
  • Surf, skim o flysurfing: sólo para las más atrevidas. Al tratarse de deportes de riesgo, es necesario contar siempre con ayuda de profesionales.

Si no te animas a practicar ninguno de los anteriores, también puedes mantenerte en forma corriendo por la orilla de la playa o nadando. Lo importante es no limitarnos a pasar el día tumbadas en la arena.

Otros consejos a tener en cuenta

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  • Es preferible caminar por la playa en las horas de menor exposición solar (las primeras horas del día y las últimas de la tarde).
  • Nunca te olvides de aplicar bloqueador solar (aunque esté nublado) y de llevar un botellín de agua para evitar bajadas de tensión por causa del calor o deshidratación.
  • Los paseos por la orilla, a ritmo lento y durante más de 20 minutos son muy beneficiosos para el sistema cardiovascular.
  • Para aumentar la intensidad de tus entrenamientos, puedes correr por el agua a lo largo de la orilla. La resistencia del agua obliga a los músculos a realizar un trabajo más intenso.
  • Si nadas (sobre todo si no eres una experta nadadora) debes hacerlo siempre en áreas seguras, cuando no haya oleaje y en paralelo a la costa.
  • Después de una actividad física agotadora como correr, debes realizar estiramientos de las extremidades inferiores para evitar la tensión muscular.