¿Se necesitan tratamientos de belleza muy costosos para prevenir la aparición de arrugas y flacidez en el rostro? Existen muchas técnicas de rejuvenecimiento facial con y sin cirugía, mínimamente invasivas, pero también contamos con terapias alternativas practicadas desde hace miles de años por la medicina tradicional asiática, secretos de belleza ancestrales para conservar una piel joven y bonita.


Para las arrugas, nada mejor que un masaje facial: estimula la circulación, activa los músculos faciales y alivia tensiones, uno de los motivos que puede propiciar la aparición de líneas de expresión en el rostro.

Debemos utilizar las yemas de los dedos, los pulgares y las palmas de las manos para abarcar todas las partes del rostro y cuello. También se recomienda acompañar este masaje de una loción tonificante o de un tónico natural (por ejemplo la manzanilla).

Comienza con movimientos circulares sobre los párpados y desciende hasta las mejillas para terminar en la zona de la papada.

Se recomienda practicar los masajes durante 10 minutos, mañana y noche antes de acostarse. La constancia es clave para obtener buenos resultados. Está comprobado que los masajes faciales trabajan sobre el tejido cutáneo mejorando la elasticidad del rostro y proporcionándole un aspecto jovial.

La modalidad de masaje qi gong

Frente al automasaje facial clásico, la técnica qi gong tiene sus particularidades.

Este tipo de masaje es practicado desde épocas ancentrales por la medicina tradicional china. Sirve para relajarnos y armonizar las energías de nuestro cuerpo. Además, mejora la circulación sanguínea, previene las arrugas y elimina los signos de fatiga. Otros beneficios para la salud que se le atribuyen es que calma las jaquecas, el insomnio y las contracturas que pueden llegar a producirse en los músculos de la cara y del cuello.

Es importante que el masaje sea muy suave, sin emplear la fuerza. Comienza por la frente haciendo ligeras fricciones sobre los ojos, las mejillas y la boca.

La fricción puede ser más fuerte en la zona de la mandíbula y en las orejas. Luego frota enérgicamente la frente hasta sentir calor (puedes utilizar una esponjita facial o una toalla). Esto nos permite reactivar la circulación y evitar la formación de arrugas. La zona de la boca es muy delicada. Pondremos un dedo índice por encima del labio superior y otro por debajo y masajearemos horizontalmente 15 veces. Luego cambiamos los dedos y repetimos 15 veces más.

Pero, como lo mejor es siempre ver un ejemplo práctico, os dejamos con este videotutorial donde nos enseñan a hacer un masaje facial qi gong paso a paso.

¿Os animáis a ponerlo en práctica?