Cada vez más personas conocen los beneficios que los aceites esenciales tienen para la salud. Algunos de ellos cuentan incluso con propiedades antiinfecciosas y antivirales que estimulan el sistema inmune, aumentando nuestra resistencia ante los catarros y otras afecciones características de la época invernal.


¿Cómo podemos usar de forma segura los aceites esenciales?

  • Si utilizas aceites esenciales en el hogar, opta por un difusor de esencias en lugar de los quemadores ya que sus propiedades terapéuticas se alteran al superar los 45 Cº
  • Los aceites esenciales no pueden aplicarse directamente sobre la piel sino que deben diluirse previamente en otro aceite vegetal, en emulsionantes o cremas de base oleosa.
  • También es importante asegurarnos de que los aceites esenciales que vamos a comprar estén quimiotipados (identificados químicamente de forma inequívoca), que sean puros y elaborados por un laboratorio de prestigio.
  • Las personas con alergias o dermatitis atópica deben realizar un test antes de utilizar cualquier aceite esencial. Consiste en colocar unas gotas de aceite en el pliegue del codo y observar si en un plazo de unos 15 minutos se produce reacción cutánea. Si no hay reacción negativa, se puede utilizar sin problemas.
  • En el caso de mujeres embarazadas, está prohibido el uso de aceites esenciales durante los tres primeros meses de gestación. Pasado el primer trimestre y durante la lactancia, algunos aceites esenciales están permitidos bajo supervisión médica.
  • Lo mismo podríamos decir en el caso de los niños para quienes no está recomendado el uso tópico de los aceites esenciales aunque pueden beneficiarse de sus propiedades por vía inhalatoria (mediante un difusor de esencias) para relajarse en situaciones de estrés, aliviar mareos o mejorar la concentración en los estudios.