Los pies suelen ser una de las zonas más castigadas de nuestro cuerpo. Aguantan el peso corporal durante muchas horas del día y se encuentran encerrados en zapatos que a menudo aprietan y provocan callos, durezas, juanetes y uñas encarnadas.


La mayor parte del tiempo los pies soportan niveles altos de humedad debido a la sudoración, que propicia la aparición de hongos tanto en la piel como en las uñas. En verano, debido a las altas temperaturas y la falta de hidratación, aparecen las dolorosas grietas en los talones, y con la temporada de piscinas los contagiosos papilomas (verrugas de los pies provocadas por virus).

Pero, por suerte, los pies absorben rápidamente los principios activos de los bálsamos que les aplicamos y basta con cuidarlos un poco para evitar la mayoría de estos problemas.

¿Qué bálsamos podemos utilizar para cuidar nuestros pies?

El aceite de Neem es uno de los bálsamos de pies más antiguos que se conocen. Procede de la India donde se utiliza desde hace 4000 años.

Este aceite es rico en ácidos grasos que ayudan al mantenimiento de las fibras de colágeno. Además es antiséptico, ayuda a la cicatrización de las heridas y hace que la piel seca recupere su suavidad y elasticidad. Por este motivo, es uno de los aceites más empleados en la preparación de bálsamos caseros para los pies, ya sea al combinarlo con otros aceites vegetales, cremas o geles.

Naissance Aceite Vegetal de Neem Virgen BIO n. º 235 – 250ml - Puro, natural, certificado ecológico, prensado en frío, vegano y no OGM.

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  • Aceite de Neem 100 % puro, virgen, prensado en frío y certificado ecológicamente por la Soil Association. Proviene de la India con INCI: Azadirachta Indica, sinónimos: Melia Azadirachta.
  • Es rico en ácidos grasos esenciales, ideal para elaborar tus propios productos cosméticos combinándolo con otros aceites vegetales y aceites esenciales. Apto para todo tipo de pieles, particularmente beneficioso para la piel seca y madura.
  • Posee un olor natural fuerte y acre y una textura cerosa y suave a temperatura ambiente. Para estado líquido, usa el baño María o mézclalo con otro aceite vegetal (como máximo un 10% de neem y 90% de otro aceite).
  • Vegano 🌻 y no probado en animales 🐇

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Algunas recetas caseras de bálsamos reparadores para los pies

Dependiendo del problema a tratar, podemos utilizar diferentes combinaciones de ingredientes para el cuidado de nuestros pies.

Grietas

Necesitas:

Mezcla todos los ingredientes en un recipiente limpio removiendo con una espátula de madera para que se integren bien. Esta fórmula es ideal para los talones agrietados pero también puedes usarla para las manos muy secas cuando existe mucha deshidratación por causa del frío o del calor extremos.

Lo mejor es aplicar el bálsamo por la noche, justo antes de ir a dormir y lavar los pies a la mañana siguiente.

Hongos

El aceite de Neem o el aceite de Árbol de Té en combinación con otros aceites vegetales son excelentes para combatir los hongos en los pies. También puedes preparar un bálsamo con carbonato de magnesio y óxido y estearato de zinc. Evita la maceración, el prurito y el desarrollo de pie de atleta y ónocomicosis.

Tiene propiedades secantes, germicidas y fungicidas.

Callos

Necesitas:

Preparación:

  1. En un recipiente al baño María, coloca la lanolina y el aceite de coco hasta que se derritan.
  2. Espera a que se entibe un poco la mezcla e incorpora la urea y el ácido cítrico. Mezcla bien con una espátula de madera para que se integren.
  3. Por último, añadiremos a nuestro bálsamo reparador para pies la vitamina E. Volvemos a remover durante un rato y envasamos el producto.

Utiliza este bálsamo para ablandar las callosidades de los pies después de una exfoliación suave.

Pies cansados

Necesitas:

Preparación:

  1. Pesa todos los ingredientes por separado.
  2. Coloca en un recipiente el gel puro de aloe vera y añade el hidrolato de romero. Mezcla bien con ayuda de una espátula de madera.
  3. Por último incorporamos el aceite vegetal de rosa mosqueta y el aceite esencial de lavanda (u otro de tu elección). Volvemos a remover para que se integren.

Guarda este gel refrescante en el refrigerador y utilízalo para calmar la sensación de cansancio en tus pies después de una larga caminata. Al no llevar ningún tipo de conservante, podrás guardarlo 4 ó 5 días refrigerado sin que se deteriore. Es mejor preparar una cantidad pequeña de cada vez.

Calambres en los pies

Necesitas:

Derrite la lanolina al baño María e incorpora los aceites esenciales una vez que entibie. El aceite esencial de sándalo y de enebro tienen propiedades relajantes y antiinflamatorias. Si sientes calambres en los pies después de correr o practicar deporte. ¡Prueba este bálsamo calmante para sentirte mejor!

Recuerda que no todos los problemas en los pies pueden solucionarse con remedios caseros. Algunos tipos de eccemas, tiña, sarna, uñas encarnadas, etc. requieren de atención médica. ¡No descuides la salud y el cuidado de tus pies!