Por lo general, las mujeres tenemos la primera regla en torno a los 12 años. Casi siempre la gestión que hacemos del flujo menstrual está influenciada por los conocimientos que recibimos de nuestras madres, hermanas o amigas. También suele influir la educación sexual, los mensajes publicitarios y, por supuesto, las preferencias personales.
En los últimos años vivimos un gran cambio cultural en la forma de ver y experimentar la regla. La menstruación ha dejado de ser un tema tabú y un buen ejemplo es la aparición de productos novedosos en el campo de la higiene íntima femenina, un sector en el que hasta el momento existía muy poca innovación.
Las bragas menstruales son de todo menos una moda pasajera. Cada día son más las mujeres que optan por estas prendas como una alternativa sostenible y económica al uso de compresas y tampones.
En este artículo aclararemos algunas dudas frecuentes sobre el uso de bragas menstruales y te daremos razones de peso para hacerte con ellas.
¿Qué son las bragas menstruales?
Las bragas menstruales son una prenda interior femenina pensada para los días de tu periodo o también en el caso de pérdidas leves de orina.
Su apariencia no es diferente a la de cualquier otra braguita de tu cajón; se colocan exactamente igual y son super-cómodas. Están fabricadas con materiales suaves y transpirables que absorben la humedad y se ajustan perfectamente a la anatomía de tu cuerpo. Incluso puedes utilizarlas para hacer deporte sin tener que preocuparte por un escape.
¿Cómo funcionan?
Las bragas menstruales cuentan con una tecnología absorbente que retiene el flujo y neutraliza el mal olor.
La parte exterior de la prenda repele la humedad, mientras que la parte interior incluye varias capas de algodón y tela que absorben el flujo. Además, tienen paneles laterales ergonómicos para permitir una mayor libertad de movimiento.
Ventajas de usar bragas menstruales.
- Son un producto sostenible ya que se pueden reutilizar y no generan residuos que contaminan el planeta. El uso continuado de compresas y tampones tiene un impacto muy negativo en el medio ambiente. Por ejemplo, las compresas son 90% plástico y pueden tardar hasta 300 años en descomponerse en la Naturaleza.
- Son seguras para tu cuerpo. Productos de higiene femenina como las compresas o los tampones pueden resultar tóxicos o ser disruptores endocrinos. Por ejemplo, se recomienda no llevar tampones más de 8 horas seguidas pues esto aumenta el riesgo de sufrir shock tóxico (TSS), una infección poco frecuente, pero considerada como una emergencia médica.
- Ofrecen una protección completa. A diferencia de las compresas, no se mueven ni se desplazan. Las bragas menstruales se ajustan perfectamente a tu cuerpo evitando manchas y derrames.
- Son muy cómodas. Si has empezado a usar la copa menstrual, pero has tenido que dejarla porque te causaba molestias, aquí tienes una alternativa ecológica y realmente confortable.
- Son baratas. Si las cuidas bien, pueden durar hasta cuatro años. En todo ese tiempo no tendrás que comprar productos desechables. ¡Y qué poco apetece tener que salir a buscar una tienda o una farmacia abierta cuando nos baja la regla en el momento más inesperado! Tus braguitas menstruales estarán siempre preparadas en el cajón y no tendrás que preocuparte más por estas situaciones.
¿Dónde comprar bragas menstruales de calidad?
Te recomiendo visitar la tienda online de Gisela para comprar tus braguitas menstruales con la mejor relación calidad/ precio.
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Están fabricadas con un 95% de algodón Eko orgánico que neutraliza el olor y es respetuoso con la piel y el medio ambiente. Un tejido recomendado por los ginecólogos por sus propiedades antibacterianas.
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Según la marca tienen un tiempo de uso estimado de 8/ 10 horas (lo que equivaldría a unos 4 tampones).
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Están disponibles de la talla S a la XL y tienen un diseño sporty sin costuras para mayor comodidad. Vienen en dos modelos diferentes: “media absorción” y “alta absorción”. Las segundas son un poco más altas y me parecen las más indicadas para llevar por la noche, mientras que el modelo de absorción media es más cómodo para llevar durante el día y moverse con soltura (incluso podrás ponértelas para ir al gimnasio).
Por supuesto, las braguitas menstruales de Gisela se pueden usar en combinación con otros productos de higiene como la copa menstrual, aunque si tu flujo no es exageradamente abundante no lo necesitas.
Cuidados y limpieza.
Las bragas menstruales se pueden reutilizar durante varios periodos. Al retirarlas, debes aclararlas primero con agua fría e introducirlas después en la lavadora (max. 30ºC y sin suavizante). Al igual que con cualquier otra prenda interior, no debes usar secadora para retirar el exceso de humedad. Debes secarlas siempre al aire libre y lo mejor es disponer de 3-5 braguitas para completar todos tus días de periodo.
¿Has probado ya las bragas menstruales? Si es así ¡anímate a contar tu experiencia!
