La camomila o manzanilla es una planta utilizada en medicina natural desde hace milenios. Civilizaciones como el Antiguo Egipto, Grecia y Roma se sirvieron de ella para elaborar toda clase de remedios. Al llegar la Edad Media su popularidad creció. Los monjes tradujeron las obras antiguas sobre plantas medicinales y la camomila se utilizó para tratar diferentes dolencias como cólicos, fiebre, náuseas, inflamación y enfermedades de la piel.
La manzanilla pertenece a la familia de las Asteráceas que abarcan diferentes variedades de esta planta, siendo la manzanilla alemana (Marticaria recutita) y manzanilla romana (Chamaemelum nobile) las dos más reconocidas por sus virtudes terapéuticas.
¿De dónde vienen las propiedades medicinales de la manzanilla?
Las propiedades medicinales de la manzanilla vienen de sus flores parecidas a las margaritas y que contienen aceites volátiles (bisabolol, óxidos de bisabolol A y B y matricin) y polifenoles (apigenina, quercetina, patuletina y luteolina) que le otorgan su poder antioxidante.
Las investigaciones científicas de los últimos veinte años avalan muchas de las propiedades terapéuticas de esta planta y se han establecido mecanismos farmacológicos para su uso.
En concreto, se demostró que la manzanilla posee propiedades:
- Antioxidantes
- Antiinflamatorias
- Antibacterianas
- Antiespasmódicas
- Antialérgicas
- Relajantes
- Sedativas
En la actualidad sigue presente en la farmacopea de 26 países.
¿Cómo se usa la camomila o manzanilla?
El uso más conocido de la manzanilla es en infusiones, pero existen otra formas de aprovechar los beneficios de esta maravillosa planta medicinal: cápsulas o comprimidos para combatir la acidez, cremas corporales y jabones o su valioso aceite esencial, muy utilizado en la formulación de toda clase de cosméticos naturales.
Usos medicinales de la manzanilla:
- Alivia el estrés: tiene propiedades relajantes y sedantes que reducen las sensaciones de estrés y ansiedad. También ayuda a conciliar el sueño en las personas que sufren insomnio.
- Aligera las digestiones pesadas: si se toma como infusión después de las comidas reduce la pesadez estomacal y calma los cólicos intestinales. Esto se debe a las propiedades antiespasmódicas y hepatobiliares que posee esta planta medicinal. Relaja los músculos que recubren las paredes del estómago y del intestino aliviando las náuseas, el ardor y las flatulencias.
- Calma la piel irritada: gracias a su alto contenido en mucílagos la manzanilla cuenta también con propiedades antiinflamatorias y antibacterianas. Estas propiedades están presentes tanto en su hidrolato como en el aceite esencial. Podemos utilizarlos para calmar la irritación de la piel después de quemaduras solares leves, aliviar la picazón del eccema y acelerar la curación de heridas, orzuelos y granos infectados. Es apta para todo tipo de pieles, incluso la piel sensible.
- Desinflama las bolsas de los ojos: es uno de los usos más conocidos de esta planta. Puedes colocar unas compresas de té frío de manzanilla en los ojos para reducir la hinchazón de bolsas y ojeras. También es útil para los pacientes con conjuntivitis pues unas gotitas de agua de camomila en los ojos alivian el picor y el enrojecimiento.
- Aclara el cabello rubio: la camomila puede aclarar uno o dos tonos el color de los cabellos rubios. Hay champús especiales formulados en base a esta planta que te servirán para este fin.
- Ayuda a eliminar toxinas: la infusión de manzanilla es diurética, contribuye a eliminar toxinas de desecho y disminuye la retención de líquidos. Lo mejor es beberla por la mañana en ayunas o antes de las comidas. No se deben exceder las tres tazas diarias.
- Es un antihistamínico natural: en terapias de vapor alivia los síntomas de la alergia.
Contraindicaciones de la camomila o manzanilla.
La manzanilla es una planta medicinal segura para la salud, pero es mejor evitarla en determinadas circunstancias:
- No está recomendada en pacientes hipoglucémicos.
- Durante el embarazo y la lactancia se debe moderar su consumo.
- No se debe tomar con anticonceptivos hormonales pues reduce su eficacia.
- Los pacientes en tratamiento con anticoagulantes deben informar a su médico antes de tomar infusiones o suplementos de camomila.