Existen muchos ingredientes naturales con los que podemos dar color a nuestros jabones caseros, desde pigmentos minerales a especias o vegetales deshidratados.

A la hora de elaborar jabones caseros, debemos tener en cuenta que el aceite vegetal que empleamos de base determinará su color natural. Por ejemplo el aceite de oliva verde tiene un color amarillo claro, el aceite de aguacate sin refinar da como resultado tonalidades verdosas y el aceite de espino amarillo es naranja.

Especias, plantas y semillas para dar color:

  • Remolacha: da un tono grisáceo.
  • Raíz de Alkanna: en jabones, da tonos de malva.
  • Achiote, cúrcuma y pimienta: tonos de amarillo y naranja
  • Espirulina, espinaca molida u hojas de ortiga molida: verde
  • Índigo: azul

Pigmentos minerales para hacer jabones caseros:

  • Óxidos de hierro, Ultramarines, Dioxido de Titanio: dan colores estables al jabón, aunque algunos pueden cambiar de color (por ejemplo del violeta sale un tono gris).
  • Arcillas (rosa, verde, roja o amarilla). De ellas suelen salir colores bastante estables y duraderos.

Los colorantes naturales, a diferencia de los sintéticos, no producen irritación en la piel. Sin embargo también tienen sus inconvenientes y es que al ser orgánicos, pueden cambiar con el tiempo (no son tan estables). Por lo general, tienden a volverse más claros.

Los pigmentos también pueden dar resultado colores inesperados. Esto sucede sobre todo si empleamos sosa caústica para elaborar nuestro jabón. Los jabones con glicerina, mantecas o aceites dan resultados de color más fiables.

Jabones con glicerina: logra el color deseado.

Estas recomendaciones son orientativas:

  • Violeta: pigmento mineral de color violeta
  • Gris oscuro: remolacha en polvo
  • Azul claro: pigmento mineral azul ultramar + dióxido de titanio
  • Azul intenso: pigmento mineral violeta ultramar
  • Verde claro: espirulina en polvo o bien ortiga en polvo
  • Rosa: pigmento rosa ultramar + dióxido de titanio
  • Gris: Índigo
  • Coral: arcilla rosa
  • Naranja: annato molido + dióxido de titanio
  • Gris claro: raíz de Alkanna (muy poco)

Recuerda que es importante disolver antes los pigmentos con un poco de aceite antes de añadirlos a la base del jabón, para que el color quede uniforme.

En el caso del annatto en polvo y la raíz de Alkanna es mejor macerarlo unas horas antes en aceite y luego pasarlo por un colador para que el tono sea más intenso.

Si quieres obtener un jabón con dos colores, puedes emplear un molde especial que divida las secciones de color que tendrá tu jabón.