Según indican varios estudios, el estrés y la falta de tiempo libre contribuyen a que en muchos casos no logremos nuestro objetivo de ponernos en forma. ¿Es este tu caso?


Si tienes una jornada de trabajo continuada y los minutos contados para comer, seguir una dieta  saludable se vuelve más complicado. Estos sencillos consejos pueden ayudarte a mantener tu peso ideal durante todo el año.

  • Trata de no comer en el escritorio. Almorzar en la mesa de trabajo aumenta el ansia por consumir alimentos envasados y procesados.
  • Bebe líquidos: agua, té helado, infusiones o zumos sin azúcar. Es la mejor forma de eliminar toxinas y favorecer la circulación de retorno.
  • Evita en cambio las bebidas gaseosas que harán que te sientas hinchada e incómoda al trabajar.
  • No te olvides de la fruta. Lleva siempre una o dos piezas en tu bolso para comer entre comidas o un pequeño bol con fruta picada para merendar.
  • Recurre a los snacks saludables. Nada de patatas fritas o gominolas. Sustitúyelas por barritas multi-cereales bajas en calorías o por trocitos de apio. Son saciantes y ricos en vitaminas.
  • Si comes en bares y restaurantes, procura evitar los platos combinados y aquellos que contengan demasiadas frituras.

¿Cuál es vuestro secreto para mantener la línea en el trabajo?