A menudo las personas que están a dieta calculan exhaustivamente el número de calorías que consumen a lo largo del día, pero pocos se fijan en la concentración de toxinas que tienen los alimentos que consumen a diario.

Las toxinas son las peores enemigas de tu dieta ya que relentizan el trabajo del hígado cuya función es la de metabolizar las grasas en energía. Además, impiden el correcto drenaje de los lípidos en sangre y son como un imán para que todas esas grasas se conviertan en reservas. En otras palabras, cuanto más tóxico se vuelve tu cuerpo, más tendencia tienes a engordar.

Al eliminar las toxinas de tu dieta, tu organismo se vuelve más eficiente a la hora de absorber las vitaminas y minerales presentes en los alimentos y con ello también se fortalece tu sistema inmune y tu salud en general. Las dietas desintoxicantes no sólo promueven la pérdida de peso, también previenen las digestiones pesadas, los resfriados, las jacquecas o el dolor articular.


Por ello te daremos algunos consejos muy sencillos y prácticos para eliminar toxinas de tu dieta sin grandes sacrificios. ¡No te los pierdas!

  • Elimina los alimentos procesados de tu dieta: se trata de uno de los alimentos con más toxinas y no se debe abusar de su ingesta.
  • Evita la cafeína y las bebidas alcohólicas: en su lugar bebe entre 8 y 12 vasos de agua al día para limpiar tu organismo.
  • Come abundante fruta: ciruelas, bayas, arándanos… apoyan el proceso de desintoxicación del organismo.
  • Haz ejercicio tres días a la semana: el ejercicio físico oxigena el cuerpo y favorece la eliminación de toxinas a través del sudor.

Recuerda que debes acudir a la consulta del médico antes de comenzar una nueva dieta o rutina de ejercicios.