Dormir bien es indispensable para gozar de buena salud. Si no descansas plácidamente por la noche lo más probable es que a la mañana siguiente estés de mal humor y no puedas cumplir al cien por cien con tus obligaciones.

Algunos detalles que solemos observar a la hora de acostarnos son la ausencia de ruido, que la cama sea confortable y que la habitación tenga una temperatura agradable, pero ¿sabías que la decoración del dormitorio también favorece la relajación? Cuidar detalles como la ubicación del mobiliario o el color de las cortinas nos predispone a disfrutar de un sueño reparador.

Desde Inspiración Al Cuadrado, estudio de Diseño de Interiores en Madrid, comentan que «la decoración de interiores puede llegar a ser un arma muy poderosa para crear un espacio tranquilo, donde sea más sencillo el poder descansar, sentirse mejor y dormir. Sólo es necesario seguir algunas reglas muy simples: las reglas del feng shui para la casa y, en especial, las normas del feng shui en el dormitorio«.

Convierte tu dormitorio en un templo del relax.

Para sentirte cómoda y bien debes estar a gusto con lo que te rodea. Debe ser el espacio que habitas el que se adapte a ti y no al revés. El tacto de los materiales, la iluminación e incluso los aromas pueden influir positivamente en el descanso.

Textiles

Elige bien la ropa de cama: sábanas, colchas, edredones… Debes asegurarte de que sean de buena calidad pues estarán en contacto directo con tu cuerpo. Lo mejor es apostar por las fibras naturales como el algodón o el lino ya que regulan la temperatura corporal de manera natural. Evita en la medida de lo posible los materiales sintéticos.

Otro elemento clave en la decoración de interiores son las alfombras. Proporcionan sensación de confort y son un buen aislante térmico y acústico.

Distribución del mobiliario.

Busca ante todo el equilibrio visual. Disponer los muebles de forma simétrica proporciona tranquilidad. Sobre todo, evita la saturación: un espacio despejado te ayudará a conciliar el sueño.

Colores relajantes

Los colores suaves y cálidos como el marfil, el ocre o los tonos tierra contribuyen a relajar el sistema nervioso. También los tonos fríos como el azul, el malva o el gris aportan paz y sosiego. A decir verdad, la elección de los colores es algo muy personal, aunque deberías evitar en cualquier caso la excesiva mezcla cromática o abusar de las texturas.

Iluminación

La luz del dormitorio debe ser suave y cálida. Luces demasiado intensas actúan sobre el hipotálamo en el cerebro haciendo que nos mantengamos alerta.

Si te gusta leer un libro antes de ir a la cama, opta por crear una luz focal y suave como la de una lamparita sobre la mesilla de noche.

Evita los electrodomésticos en el dormitorio.

Muchos aparatos electrónicos desprenden calor y emiten sonidos que parecen imperceptibles, pero que pueden perturbar el descanso de las personas que sufren insomnio. El televisor, el ordenador o el teléfono móvil son ejemplos de aparatos que no deberías tener en el dormitorio.

Aromaterapia para dormir mejor.

Algunos aromas como la lavanda tienen un efecto sedante sobre el sistema nervioso. Puedes colocar unas gotitas de esencia sobre la almohada o utilizar un difusor de esencias para distribuir mejor su fragancia por todo el dormitorio.

Esperamos que te hayan gustado estos consejos y te animes a decorar tu casa siguiendo las normas del feng shui.