La mayor parte de los nutricionistas coinciden en el dato: en invierno engordamos más. No existe una razón específica de ello sino un cúmulo de circunstancias que tienen que ver con el modo en que nuestro metabolismo reacciona ante el cambio estacional.


Por lo general, en esta etapa consumimos una mayor cantidad de hidratos de carbono y grasas saturadas: patatas fritas, legumbres, salsas y alimentos dulces. No es una casualidad sino una respuesta natural de nuestro cuerpo que nos incita a consumir comidas hipercalóricas para aumentar la temperatura corporal.

Magdalena Ramos Mejía, licenciada en nutrición del equipo médico interdisciplinario de Gastroenterología Diagnóstica y Terapéutica asegura que «La serotonina – neurotransmisor que encuentra sus valores más bajos durante el invierno – es el responsable, entre otras cosas, de nuestros estados de ánimo. Así es como instintivamente buscamos alimentos cargados de hidratos de carbono y azúcares, que en general también contienen grasas, para sentirnos mejor».

Además el mal tiempo puede hacer que nos sintamos decaídas, salgamos menos y reduzcamos por consiguiente nuestro nivel de actividad física. Todo ésto se traduce en calorías que no llegan a quemarse y que se acumulan en forma de grasa corporal. ¿Cómo podemos evitarlo? Sigue estos sencillos consejos y conseguirás ponerle freno a los kilos de más.

Toma sopa como primer plato

Ingerir líquidos calientes hace que estabilicemos la temperatura corporal; además, es una comida saciante que reduce la sensación de hambre y el picoteo entre horas.

Modera el consumo de cafeína

O sustituye algunas de las tazas de café que tomas durante el día por zumos naturales o tisanas relajantes. De este modo reduciremos nuestro nivel de estrés y la ansiedad que provoca que comamos chucherías sin control.

Ponte en forma desde casa

Si el mal tiempo no permite salir a caminar, siempre puedes recurrir a los aparatos de fitness de uso casero como la bicicleta estática. Son ideales para ejercitarte y quemar calorías a tu ritmo sin necesidad de ajustarte a los horarios de un gimnasio.

Días especiales

Cenas navideñas, fin de año y celebraciones en familia… son fechas especiales en las que comemos un poco más de la cuenta. Disfruta con normalidad de los platos que se sirvan en la mesa, pero trata de moderar el consumo de alcohol y los postres industriales que entorpecen el drenaje natural de toxinas en tu cuerpo haciendo que estas se acumulen y que luego se adhieran a las células adiposas en los tejidos conectivos dando lugar a la celulitis.