El paso de los años y otras veces la dejadez en los cuidados de la piel, pueden hacer que esta se reseque en exceso e incluso llegue a desescamarse. Esta crema casera con aceite de Argán y escualano de oliva te ayudará a devolverle la suavidad y luminosidad perdidas.
Necesitas:
- 10 gramos de aceite de Argán
- 10 gramos de escualano de oliva
- 5 gramos de Protelán
- 20 gramos de gel puro de aloe vera
- 2 gramos de ácido hialurónico
- 0,2 gramos de Coenzyma Q10
- 10 gotas de Sharomix
- 10 gotas de aceite esencial de geranio
- 3 gotas de vitamina E extra-fuerte
Preparación:
- Pesa todos los ingredientes por separado en una báscula de precisión.
- Coloca un recipiente al baño María con el Protelán, el aceite de Argán y el escualeno de oliva. Calienta hasta que los copos de Protelán se derritan, removiendo de vez en cuando.
- En otro recipiente colocaremos el gel puro de aloe vera y le añadimos la Coenzyma Q10 y el ácido hialurónico. Remueve enérgicamente hasta obtener una mezcla de textura homogénea.
- Mezcla la fase acuosa y la fase oleosa. Utiliza la batidora eléctrica a media potencia durante algunos minutos. Para favorecer la emulsión, coloca la mezcla en un bol con agua fría y sigue batiendo.
- Para finalizar y cuando se haya reducido la temperatura, incorporaremos a la crema el conservante Sharomix, el aceite esencial de geranio y la vitamina E extra-fuerte. Batimos bien y envasamos.
Esta crema puede durar hasta tres meses a temperatura ambiente. Puedes utilizarla tanto por la noche como por el día, pero recuerda que al no tener ningún tipo de filtro solar, debes aplicar un fotoprotector antes de la crema si piensas salir a la calle.