Dependiendo del método que elijamos, la depilación puede llegar a ser un procedimiento agresivo para la piel. Debemos sopesar este hecho a la hora de depilarnos cualquier parte del cuerpo, pero si hablamos de depilación íntima, es necesario ser doblemente cuidadosas. La gran cantidad de vello presente en la zona del pubis, su dureza y la condición especialmente sensible de la piel, pueden provocar dolor, irritaciones o aparición de granitos (foliculitis).


Con todo, hoy en día la mayoría de las chicas optan por depilarse la entrepierna por motivos estéticos, de higiene, etc. La depilación brasileña puede ser integral o parcial, abarcando solamente las ingles y la denominada «línea del bikini».

Existen varias formas de remover el vello de la zona genital. Las más duraderas (aunque también las más doloras) consisten en extraer el pelo de raíz; aunque hay otras alternativas más rápidas e indoloras como el rasurado. Veamos una a una las opciones que existen para elegir la que mejor se adapte a nuestras necesidades.

Afeitado con cuchilla

La mayoría de las chicas recurren a este sistema por ser el más rápido, económico e indoloro. Tiene como inconveniente que el vello crece muy pronto ya que no se elimina de raíz sino que se rasura, de modo que apenas durará uno o dos días. A veces, cuando comienza a reaparecer hacia la superficie, pueden producirse picores.

Es un mito que afeitarse el pelo de cualquier zona del cuerpo haga que este se vuelva más duro, pero al ser más corto y en punta, puede dar esa sensación hasta que alcance la longitud que tenía anteriormente.

Si decides rasurarte el vello genital, debes ser muy cuidadosa examinando el buen estado de las cuchillas y hacerlo sin prisas para no cortarte. Te recomendamos usar un jabón cremoso y afeitarte en dirección al nacimiento del vello.

Cremas depilatorias

Al igual que en el caso anterior, el vello no se elimina de raíz. A pesar de ser un método indoloro, lo desaconsejamos totalmente en esta zona del cuerpo, ya que se trata de un producto abrasivo que no debe entrar en contacto con la mucosa genital pues podría provocar reacciones alérgicas o úlceras en la piel.

Cera

Si quieres una depilación íntima más duradera, la cera es sin duda una de las mejores opciones. Es dolorosa pero efectiva ya que el vello tarda más en reaparecer. Tiene como desventaja que es complicado usarla nosotras mismas en casa y que, al ser necesario aplicar cera caliente, hay que ser precavidas para no quemarse.

La depilación brasileña con cera está desaconsejada para mujeres con problemas de varices o con la piel sensible. Después de realizarla, la zona suele quedar enrojecida y es necesario usar una crema humectante y evitar la exposición solar.

Depiladoras eléctricas

Es el método más doloroso ya que las pinzas del rodillo de la máquina extraen el pelo uno a uno,  y el folículo piloso del vello genital es más grueso y duro que el del resto del cuerpo. Además, este sistema puede provocar la aparición de pelitos enquistados (foliculitis), motivos por los cuales desaconsejamos el uso de depiladoras eléctricas para la zona.

Fotodepilación

Si quieres olvidarte definitivamente de la depilación íntima, el láser o la luz pulsada te ofrecen soluciones permanentes para estar siempre perfecta. Al destruir el folículo piloso, el vello no vuelve a aparecer, y con esto nos olvidaremos también de otros problemas derivados de depilarse las ingles como la aparición de granitos. El único inconveniente es su elevado precio, aunque ahorrando un poco, no es incosteable. Seguro que a la larga no te arrepientes de haber gastado ese dinero.