Muchas mujeres que piensan someterse a una cirugía de aumento de senos se sienten indecisas por ciertas dudas y temores que tienen su origen en informaciones falsas o desactualizadas. Si bien es cierto que una intervención quirúrgica es una decisión que debe meditarse y no tomarse a la ligera, cuando nos saturamos de datos o los buscamos en fuentes poco fiables podemos terminar con las ideas un poco confusas.


En nuestro artículo de hoy te hablaremos de ciertos mitos sobre los implantes mamarios que seguramente hayas escuchado en más de una ocasión. Esperamos que te sirvan de ayuda pero, sobre todo, recuerda que lo más importante para lograr un resultado satisfactorio es ponerse en manos de los mejores profesionales médicos que resuelvan nuestras inquietudes antes y después de la operación.

  • Las prótesis pueden romperse y son peligrosas: Falso. Muchas veces habrás escuchado la leyenda urbana de senos de silicona que estallan al subirse a un avión. Esto es totalmente incierto. Las prótesis de hoy en día pueden aguantar esta presión y mucho más. Hace bastantes años, se utilizaban implantes de suero fisiológico. Si se desgastaba la bolsa que las contenía o se rompía accidentalmente, el suero era reabsorbido por el organismo pero igualmente se producían grandes molestias y deformidades en el seno. Este tipo de prótesis son ilegales actualmente y están en desuso. Todos los implantes ahora homologados, están fabricados en base a un gel cohesivo de silicona y tienen una cubierta muy resistente (solamente se registran roturas en el 1% de los casos). Pero aun en el caso de que esto sucediese, el contenido continúa cohesionado y no migra hacia el exterior, por lo que no existe riesgo de que invada los ganglios y los tejidos vecinos. Puede producirse inflamación local y se hace necesaria la sustitución por otro implante pero no conlleva riesgos para la salud. En el caso de lo sucedido con las prótesis PIP en Francia, el problema fue ocasionado por la mala calidad de la silicona empleada que no tenía un buen grado de cohesividad y que no era tampoco de uso médico sino industrial. Afortunadamente los controles de calidad son ahora más exhaustivos.
  • Deben cambiarse cada 10 años: Falso. La gran resistencia de las prótesis actuales asegura una larga permanencia (en ocasiones pueden durar toda la vida) pero a partir de los diez años se recomienda hacer revisiones anuales del implante para asegurar su buen estado.
  • A partir del mes mis senos se verán como deseo: Falso. A partir del primer mes la inflamación casi habrá remitido pero los resultados definitivos no se aprecian hasta los ocho meses. Cada seno evoluciona de modo diferente y es posible incluso que notemos asimetrías en el tamaño. No debes preocuparte por estas cosas, necesitan su tiempo.
  • Puedo elegir el tamaño y tipo de prótesis que quiera: Falso. El ancho de nuestro tórax, el tamaño de nuestros senos naturales, si están caídos o no… Todos estos factores influyen en el tipo de implante que debe elegirse y en su colocación. Las mujeres sin glándula mamaria, por ejemplo, deben llevar implantes anatómicos y colocados en el plano submuscular para que el resultado sea natural. Es importante dejarse asesorar por los criterios de un buen cirujano y no querer imitar a otras pacientes, artistas o modelos.
  • Los senos operados se caen con el tiempo: ¡también los naturales! La piel pierde elasticidad con los años independientemente de si nos hayamos aumentado los senos o no. Sin embargo es cierto que si se eligen prótesis de gran tamaño, la piel puede resentirse y ceder apareciendo estrías o laxitud. Por ello se recomienda descartar este tipo de implantes ya que el resultado tampoco es muy natural.
  • Las mujeres con implantes no pueden amamantar: Falso. La cirugía de aumento de senos no daña la glándula ni los conductos mamarios.
  • No pueden hacerse mamografías: Falso. En ocasiones se recomienda hacer ecografías del implante para no presionarlo en exceso.
  • Las prótesis de silicona pueden producir cáncer: Falso. No está demostrada la relación entre los implantes y el cáncer de mama.

Para más información sobre este tema te recomendamos leer nuestro artículo «Todo sobre la cirugía de aumento mamario».