Los laboratorios de cosmética están en constante búsqueda de nuevos principios activos que mejoren la efectividad de los productos que usamos a diario para el cuidado de la piel. A día de hoy, la sustancia de moda son las células madre vegetales. Muchos cosméticos de nueva generación las incorporan en sus fórmulas prometiendo resultados casi milagrosos. ¿Son tan efectivas como se dice?
Células madre y regeneración celular.
Todas las células madre (animales o vegetales) juegan un importante papel en los procesos de regeneración celular.
Las plantas poseen células madre vegetales en sus tejidos meristemáticos y son las responsables de su crecimiento. Gracias al uso de la biotecnología, los laboratorios de cosmética extraen el contenido de estas células y las cultivan bajo condiciones controladas. Así es como encontramos células madre vegetales en multitud de productos cosméticos como cremas antiarrugas, cremas para el contorno de ojos o mascarillas para nutrir el cabello.
¿De dónde se obtienen las células madre vegetales que se usan en cosmética?
Siempre que hablamos de células madre en cosmética nos referimos a las células de origen vegetal, pues las animales o humanas sólo están autorizadas con fines médicos.
Las células madre vegetales que se usan en cosmética poseen las propiedades de la planta original y esos beneficios se trasladan a la piel. Suelen ser plantas que están expuestas de manera natural a condiciones ambientales extremas. Ya os hablamos en alguna ocasión de las propiedades de la orquídea, pero existen otras plantas con beneficios similares. Una de ellas es el Edelweiss, también conocida como «flor de las nieves» (Leontopodium alpinum). Sus células son especialmente resilentes lo que le permite resistir en un clima adverso con temperaturas heladas.
Otras células madre vegetales que se utilizan a menudo en la elaboración de cosméticos se obtienen de las manzanas suizas (Malus domestica), el hinojo o perejil marino (Crithmum maritimum), judía mungo (Vigna radiata) y centella asiática.
Productos cosméticos con células madre vegetales.
Esta es una pequeña selección de algunos de los mejores productos cosméticos que utilizan células madre vegetales en su formulación.
Tratamiento de rostro y ojos Stem Cell Collagen de Sarah Chapman
Diseñado para ser usado como un programa de rejuvenecimiento de la piel de cuatro semanas. Contiene cuatro viales de la fórmula rellenadora y reafirmante de Sarah Chapman, que utiliza una combinación de extractos de células madre botánicas revitalizantes de hinojo marino, acebo marino, argán y gardenia, así como ocho péptidos potenciadores del colágeno.
Wonder Me de Alice in Beautyland
Recupera la juventud de tu mirada con este contorno de ojos enriquecido con células madre vegetales de orquídea que aumentan la producción de colágeno y elastina, combatiendo la pérdida de firmeza del contorno ocular. Además, su fórmula contiene agua de Rosa Damascena (hidratante), extractos de flor de caléndula, aciano y pepino (antiinflamatorio, cicatrizante y calmante), aceite de higo chumbo, aceite de almendras dulces y manteca de karité.
Es adecuado para la piel sensible.
Crema antiedad con células madre de Lluchkare
Una fórmula con potentes activos naturales que mejora la textura y calidad de la piel. Enriquecida con células madre vegetales, colágeno y alantoína.
Crema nutritiva células madre de Mi Rebotica
Con células madre liposomadas de la vid (resveratrol) que le otorgan sus propiedades antioxidantes y regeneradoras. Está pensada para el cuidado diario de la piel madura y seca.
¿Cuál es la eficacia real de las células madre vegetales en cosmética?
Aunque la investigación sobre células madre para el cuidado de la piel revela su potencial como agente protector y antiedad, no podemos olvidar que estas células madre vegetales que se utilizan en cosmética ya están muertas y por lo tanto no pueden actuar de la misma manera que las células vivas empleadas en la medicina regenerativa. Sus beneficios se explican por el alto contenido en antioxidantes y fitonutrientes que poseen.
Según la Agencia Española del Medicamento: «Los tratamientos que se basan en células madre de origen vegetal no tienen ninguna relación con las células madre de origen humano y no se ha demostrado que posean ninguna utilidad en el tratamiento de enfermedades. No obstante, si así se postulara, sus efectos deberían ser probados en ensayos clínicos adecuados y les resultaría de aplicación todo lo expresado en los párrafos anteriores. La utilización de este tipo de células en cosméticos u otro tipo de productos para tratamientos estéticos no está relacionada con la prevención, tratamiento o diagnóstico de las enfermedades humanas. La utilización de la misma terminología busca, en muchas ocasiones, aprovechar el aspecto novedoso de las terapias con células madre para trasladarlo a otros ámbitos ajenos al contexto médico».
Conviene por lo tanto ser prudentes en el uso de la terminología y no relacionar los beneficios de las células madre vegetales en cosmética con supuestos efectos terapéuticos o curativos, por ejemplo, para solucionar enfermedades crónicas de la piel.
¿Habéis probado ya la eficacia de estos productos?