La higiene facial es un ritual de belleza imprescindible para conservar una piel joven, luminosa y bonita. Irse a dormir sin retirar antes los restos de maquillaje de nuestro cutis puede ocasionar problemas dermatológicos serios, desde brotes de acné a la aparición de arrugas prematuras.


Dado que no todas las mujeres tenemos los mismos horarios, hábitos de vida o tipo de piel, existen diferentes productos cosméticos pensados para desmaquillar el rostro, con distintas presentaciones y texturas que se adaptan a las necesidades de cada una de nosotras:

Leche limpiadora

Es el producto ideal para desmaquillar prácticamente cualquier tipo de piel, no irritan, hidratan tu cutis a la vez que arrastran suciedad e impurezas y sirven a su vez para las zonas más delicadas del rostro como los párpados.

Jabones faciales

Están especialmente pensados para las pieles grasas, pero no son muy útiles a la hora de desmaquillarse porque crean espuma que se mezcla con los restos de maquillaje haciendo más aparatosa la limpieza. Por este motivo, no pueden aplicarse tampoco sobre el contorno del ojo. Si los utilizas solamente para limpiar tu cara, asegúrate de que no contengan alcohol, perfumes o sustancias que puedan irritar tu epidermis.

Cremas limpiadoras

Tienen una textura un poco más densa que las leches desmaquillantes pero son igualmente eficaces.  Están aconsejadas para las pieles secas y sensibles.

Aguas desmaquillantes

Su presentación líquida las hace muy cómodas y rápidas de usar. Dejan la piel limpia y fresca al instante aunque tienen como inconveniente que no son tan hidratantes y nutritivas como las fórmulas en leche o en crema.

Aceites

Nuestras abuelas solían usar aceite de almendras dulces para desmaquillarse, antes de existir los productos de la industria cosmética que conocemos actualmente. Al contrario de lo que pueda parecer, es ideal para cualquier tipo de cutis (incluso si es graso) y puede usarse como desmaquillante para el contorno de ojos. Su único inconveniente es que resulta más caro que las anteriores soluciones.

Toallitas desmaquillantes

Si tienes poco tiempo, sin duda, ésta es la opción más práctica. Estas toallitas están impregnadas en leches o geles desmaquillantes y con sólo pasarlas por el rostro, conseguiremos limpiarnos en un tiempo récord. Son muy útiles para llevar en el bolso y corregir desperfectos del maquillaje como carmín corrido, manchas de rímmel, etc… incluso pueden sacarnos de un apuro si tu camisa preferida se ha manchado sin querer. Con todo, si nos hemos maquillado con bastantes sombras o usado una cantidad importante de cosmético, es preferible optar por la limpieza convencional, mucho más profunda y efectiva.

Si quieres conocer otras soluciones naturales para limpiar tu cutis, te recomendamos leer el artículo «Remedios caseros para limpiar y revitalizar nuestra piel».