La Semana de la Moda de Madrid comenzó el pasado lunes con la esperanza de recuperar el prestigio y las ventas después de un año y medio de caída libre. Muchas firmas se ausentaron mientras que otras aprovecharon la ocasión para reinventarse y dar visibilidad a uno de los sectores más castigados por la pandemia.


Una de las figuras más destacadas del evento fue Roberto Verino. El diseñador gallego fue el encargado de dar el pistoletazo de salida a esta 74ª edición de Mercedes-Benz Fashion Week y lo hizo por todo lo alto, convirtiendo las calles de Madrid en una pasarela. El puente de Eduardo Dato, en pleno paseo de la Castellana, fue el lugar elegido para presentar su propuesta de otoño/ invierno 2021 «Nomadismo Urbano» a través de un original desfile itinerante en seis escenarios públicos de la ciudad de Madrid.

Nomadismo Urbano se inspira en una sociedad nómada que transita de lo analógico a lo digital y que es capaz de encontrar dentro del frenetismo de la vida moderna, instantes que perduran.

«Creemos en las prendas icónicas que se atesoran, que cuentan con una historia propia, que hablan de quienes somos y nos ayudan a conectar con nosotros mismos. Creemos en fondos de armario emocionales que hacen nuestro día a día mucho más feliz» – explica Roberto Verino.

Para ello nos propone vestir gabardinas, cardigans y capas de colores neutros. Las tonalidades que predominan son el gris y el camel mientras que reserva la intensidad del rojo para los looks de noche.

«Son prendas funcionales, sencillas, una moda que defiendes con el paso de los años y te permite no ir igual que todo el mundo». – afirma el diseñador.