En verano sufrimos con más frecuencia gastroenteritis y otro tipo de problemas digestivos debido a las bacterias o parásitos en los alimentos y en el agua, que proliferan por las elevadas temperaturas y por la falta de higiene.


¡A grandes males, grandes remedios! Te daremos una serie de consejos muy útiles para consumir alimentos y bebidas de forma segura evitando estas enfermedades.

Beber agua embotellada.

Siempre que sea posible evita el agua del grifo y opta en su lugar por el agua embotellada.

Cocinar bien los alimentos.

Evita los alimentos poco cocidos, sobre todo si se refiere a las carnes animales ya que pueden ser una fuente de contagio de toxoplasmosis o salmonella. Por el mismo motivo los vegetales crudos deben ir también siempre bien lavados.

No rompas la cadena de frío.

Conserva siempre los alimentos en el interior del refrigerador. No los consumas si llevan mucho tiempo a la intemperie.

Lávate las manos.

Es importante lavarnos las manos con frecuencia y en especial antes de manipular los alimentos.

Guarda las sobras del alumuerzo en tuppers herméticos.

Si te ha sobrado comida del almuerzo, no la dejes en la olla o encima de la encimera. En lugar de eso, guárdala en tuppers herméticos y consérvala en el refrigerador para evitar que proliferen bacterias.

No te quedes con la ropa de baño mojada.

Podrías sufrir dolor de estómago o incluso una cistitis.

Para combatir la gastroenteritis deberás hidratarte a menudo y llevar una dieta blanda. Si los síntomas se agudizan, no tardes en acudir al médico.