¿Notas que la piel de tus codos se ha vuelto áspera o se ha oscurecido? Normalmente no dedicamos tantos cuidados a la piel de los codos como a otras zonas del cuerpo.

Pero estos también sufren los efectos de la deshidratación o de la sobre-exposición solar, y pueden oscurecerse o presentar descamación si no tomamos medidas al respecto.

¿Qué hacer para tener unos codos suaves?

El primer paso es la exfoliación. Debes exfoliar la piel de tus codos una vez a la semana para eliminar asperezas. Para ello puedes emplear la misma piedra pómez que utilizas para la planta de los pies. Pero si tu piel es delicada, puedes probar a hacer una mezcla con azúcar y unas cucharadas de jugo de limón.

El limón aclara la piel de forma natural, así que si tus codos están oscurecidos, este remedio les devolverá poco a poco su tono uniforme. Eso sí, debes tener en cuenta que también vuelve la piel fotosensible, así que si vas a aplicarlo, evita después pasear bajo el sol con manga corta.

Ha llegado el momento de hidratar. Si bien es suficiente con una exfoliación semanal, la piel de los codos debe hidratarse diariamente. Esto se debe a que tiene menor cantidad de glándulas sebáceas que otras zonas y por lo tanto, es más propensa a sufrir deshidratación. Utiliza para ello una buena crema corporal y masajea con ella suavemente la piel para mejorar su absorción.

Una alternativa natural es el aceite de almendras dulces. Puedes extenderlo sobre la piel de tus codos y otras zonas del cuerpo después de la ducha. Además, por si no lo sabías, este aceite vegetal es fantástico para prevenir la aparición de estrías, de modo que tenemos la solución a varios problemas de la piel en un solo producto.

¿Te han gustado estos consejos de belleza? Si así, no olvides compartirlos. Te recomendamos leer también el artículo «La solución a los codos ásperos» donde te informamos por extenso sobre cómo resolver este problema.