Desde comienzos de los años ’80 empezaron a llegar a España diferentes productos cosméticos que contenían avena en su composición. Muchas recordaréis por ejemplo la popular marca «Avena Kinesia» que entre otras cosas comercializaba cremas, champús o geles de baño en base a este ingrediente.
Y es que la avena posee innumerables beneficios para la piel. Tiene propiedades hidratantes, regenerantes y emolientes.
De hecho, muchos geles de farmacia recomendados por los dermatólogos para tratar la piel atópica, contienen avena en su formulación (un buen ejemplo es Avenamit de Isdin).
En el supermercado también podemos encontrar varias marcas que tienen en su catálogo geles con avena. Desde tiempos inmemorables se ha usado con fines cosméticos y hasta ahora no se ha encontrado nada mejor.
Preparar una mascarilla casera a base de avena es lo más sencillo del mundo. Sólo tienes que mezclar una cucharada de avena en hojuelas y un poquito de agua tibia. Mezcla bien todos los ingredientes hasta obtener una pasta de consistencia cremosa y aplica sobre el rostro, evitando la zona del contorno de ojos y de la boca. Deja que actúe unos 15 minutos y finalmente enjuaga con abundante agua fría.
Tu piel quedará radiante y sin rastro de impurezas ya que como bien sabéis, la avena es un excelente limpiador natural para la piel sensible.
Si quieres descubrir más recetas de cosmética natural con avena, te recomiendo leer este artículo que publicamos hace un tiempo.
