¡Seguro que te encantan las fresas! Solas, en batidos, con yogur o nata… Son una de las frutas más apreciadas culinariamente por su dulce sabor y sus propiedades afrodisíacas. Lo que tal vez no sepas es que las fresas tienen increíbles virtudes cosméticas. Gracias a su alto poder antioxidante, dejarán tu piel suave y luminosa al instante. ¡Además tienen un aroma delicioso e inconfundible!


¿Te imaginas lo apetecible que sería ducharnos con un jabón de fresas totalmente artesanal? Lamentablemente, muchas tiendas que ofrecen este producto nos venden en realidad jabones con fragancias y perfumes incorporados, pero sin el ingrediente original. ¡Elabóralos tú misma! En nuestro artículo de hoy te enseñaremos a preparar un jabón artesanal a base de fresas frescas que dejará tu piel sedosa y perfumada. Además puede ser un regalo original para tus amigas. Basta con cortar las pastillas en cuadraditos y adornarlas con unos bonitos lazos para darles un toque detallista.

Para hacer un jabón de fresas artesanal, necesitarás:

Preparación:

  1. Engrasa el molde que hayas escogido.
  2. Pon las grasas, los aceites de base y la cera de abejas en un recipiente de esmalte o de acero inoxidable a calentar a fuego lento.
  3. Coloca 113 gr. del agua y vierte el resto en un cuenco o jarro de vidrio o plástico fuertes.
  4. Quita las hojas y tallos de las fresas frescas y ponlas en una licuadora añadiendo el agua que has apartado.
  5. Pon en marcha la máquina hasta que las fresas queden reducidas a líquido y añádelo al resto del agua.
  6. Con unos guantes de goma y protección para los ojos, vierte el hidróxido de sodio (sosa cáustica o lejía) al líquido con las fresas y remueve hasta que se disuelva.
  7. Cuando los aceites estén derretidos, retíralos del fuego.
  8. Introduce un termómetro de fluidos en los aceites y otro en la solución cáustica. Cuando ambos lleguen a alcanzar una temperatura equivalente, entre 49 y 60 ºC, vierte la solución cáustica sobre el aceite.
  9. Remueve de vez en cuando hasta que la mezcla se cuaje, lo cual lleva aproximadamente 30 minutos.
  10. Añade el colorante y después el aceite germen de trigo y el aceite de fragancias, y remueve bien.
  11. Viértelo de inmediato en el molde y cúbrelo con una toalla o manta. Déjalo asentar durante 48 horas o hasta que el jabón adquiera una consistencia sólida.
  12. Pasado ese tiempo, con unos guantes de goma, saca el jabón del molde y córtalo en bloques. Cubre el jabón y déjalo secar durante cuatro semanas antes de utilizarlo.