La muñeca Annabelle se ha convertido en un personaje clásico del cine de terror de los últimos tiempos. Conseguir un disfraz de Annabelle no es muy complicado ya que podrás adaptar cualquier blusa blanca de tu armario poniéndole unos encajes en el escote y un lazo de blonda rojo en la cintura.


El reto de disfrazarse como Annabelle está en imitar las facciones rígidas de la muñeca. Para conseguirlo, el primer paso es cubrir nuestras cejas naturales con pegamento de barra para luego dibujar otras muy finas y arqueadas sobre su línea de crecimiento.

Cubre el rostro con cera blanca y marca los pómulos y líneas de marioneta con un lápiz delineador de color café.

A continuación, trabaja la zona de la cuenca del ojo con sombra negra sin llegar al párpado móvil. Coloca unas pestañas postizas a la altura de tus cejas naturales y utiliza otro lápiz esta vez de color blanco para abrir la mirada y conseguir unos enormes ojos de muñeca. Aplícalo sobre la parte del párpado móvil y la línea de agua inferior del ojo. Para finalizar, traza una nueva línea de color negro debajo de la de color blanco. Si lo deseas puedes colocar también unas pestañas postizas inferiores.

Sólo queda aplicar el colorete rosa intenso en las mejillas y dibujar los labios con una forma puntiaguda. El último paso es hacer las grietas de la cara con un lápiz de color negro.

¡Todo listo! Ya sólo queda ponerte la ropa y la peluca de trenzas.

Para ver cómo se hace paso a paso este maquillaje de Annabelle, no te pierdas este videotutorial en Youtube de la maquilladora Jimena Aguilar.

¡Feliz noche de Halloween!