Una tendencia que arrasa este año en las pasarelas es el look gótico. El color negro se convierte en el verdadero protagonista de las propuestas de diferentes diseñadores que proyectan con sus creaciones un haz de luz oscura en sus desfiles.
Givenchy, por ejemplo, toma como referencia la moda gótica pero en lugar de emplear cuero utiliza otros materiales más delicados como el encaje o las plumas.
Missoni también apuesta por el encaje, en esta ocasión con forma de telarañas.
Por su parte Louis Goldin hace un guiño con sus diseños al espíritu del ciber-punk: formas geométricas y futuristas forman parte de una de las colecciones más vanguardistas y originales de este invierno.
Muy constructivistas son también los diseños de Haider Ackermann y Gareth Pugh. Algunos de estos modelos parecen sacados del vestuario de una película de ciencia ficción.
