El aceite de cardo mariano se obtiene de la presión en frío de las semillas de cardo mariano, una de las plantas medicinales más utilizadas en la Antigüedad. Sus propiedades antioxidantes son diez veces más potentes que las de la vitamina E. Además tiene un efecto antiinflamatorio, siendo especialmente útil en el tratamiento de la psoriasis o dermatitis atópica.

Necesitas:

Preparación:

  1. Pesa todos los ingredientes por separado en una báscula de precisión.
  2. En un recipiente junta el aceite de cardo mariano, el aceite de caléndula y la cera emulsionante. Coloca al baño María hasta que la cera se derrita. Remueve de vez en cuando para que no queden grumos.
  3. En otro recipiente tendremos listo el hidrolato de manzanilla que podemos preparar haciendo una infusión muy concentrada de la planta.
  4. Vierte los aceites y la cera derretida sobre el hidrolato de manzanilla. Con la batidora a media potencia, mezcla bien todos los ingredientes.
  5. Agrega el óxido de zinc y continúa batiendo hasta que se integre por completo. Este componente le dará a nuestra crema propiedades fotoprotectoras.
  6. Si la mezcla se ha enfriado, podemos añadir ya el aceite esencial de lavanda (calmante y cicatrizante). Recuerda que los aceites esenciales son muy volátiles y no pueden añadirse a una mezcla con calor. Si la crema aún está caliente podemos colocar el recipiente dentro de otro más grande con agua fría y remover hasta que baje la temperatura.