Cada vez es más habitual la presencia de medusas en nuestras playas, especialmente en la orilla. Esto se debe en parte a la menor presencia de sus depredadores naturales en alta mar y al cambio climático que provoca un aumento de la temperatura del agua.
¿Cómo distinguir una medusa?
Lo más sensato es siempre prevenir la picadura de medusa y para ello es necesario reconocerlas e identificarlas bien.
Las medusas pueden tener diferentes tamaños Son animales invertebrados y de color transparente (tienen una apariencia gelatinosa). En ellas se diferencian tres partes: umbrela, brazos orales y tentáculos (que es donde se encuentran las sustancias tóxicas que utilizan como defensa). Estas toxinas continúan estando activas aún cuando la medusa está muerta, de forma que es importante no tocar tampoco sus restos.
Síntomas de la picadura de medusa
Por lo general, no suele ser necesario ir al médico por una picadura de medusa. El tratamiento suele centrarse en los primeros auxilios, aunque dependiendo del tipo de medusa y de la gravedad de los síntomas podría ser necesario acudir a un centro sanitario.
Las reacción más frecuente es una erupción cutánea leve, entumecimiento y edema en la zona afectada. Raramente, pueden darse reacciones graves que requieren de asistencia médica inmediata: calambres musculares, dificultad respiratoria, pulso acelerado, dolor en el pecho o en el estómago, desmayos o dificultad para deglutir.
Los niños, las personas alérgicas a la picadura de medusa o los pacientes con problemas cardíacos son más propensos a sufrir una reacción grave y por eso es importante estar pendientes de los síntomas para saber cómo reaccionar en cada caso.
Primeros auxilios
Tras una picadura de medusa lo mejor es acudir inmediatamente a los puestos de socorro que hay en todas las playas con bandera azul. Si no hay un puesto de socorro a la vista, debemos proceder de la siguiente manera:
- Lavar la zona afectada con agua del mar o suero fisiológico (nunca con agua dulce o agua del grifo puesto esto agravaría la reacción).
- Retirar los tentáculos visibles con unas pinzas finas (nunca con los dedos).
- A continuación, se debe aplicar frío local durante 15 minutos utilizando hielo envuelto en plástico y una toalla. Esto bajará la inflamación.
- Para aliviar los síntomas de la picadura podemos tomar un analgésico y un antihistamínico.
- Si los síntomas persisten o la picadura es severa, debemos presentarnos en el centro de salud más cercano.
