En los tiempos que corren cada vez son más las personas que viven situaciones y problemas vinculados al estrés. El estrés provoca la acumulación de toxinas en nuestro organismo y para eliminarlas es necesario reactivar el sistema circulatorio. Para ello la realización de masajes es una buena alternativa.
Hace pocos días os hablamos del tratamiento de la chocolaterapia y hoy os hablaremos del masaje ayurvédico, una modalidad de masaje cuya tradición procede de la medicina tradicional hindú.
Trabaja con el movimiento energético del cuerpo y alimenta la piel con aceites vegetales según el dosha de cada persona, que se determina con un test previo al masaje.
La palabra Ayurveda procede del sánscrito procede del sánscrito y significa «ciencia de la vida». La medicina ayurvédica tiene unos orígenes antiquísimos: nació en la India hace 5000 años y se basa en una filosofía holística del hombre que propone la unión indivisible entre el cuerpo y la mente.
Las reglas del masaje ayurvédico se encuentran en los antiguos textos que constituyen la base de la medicina ayurvédica: la Sushruta y la Charaka Samhita.
El objetivo principal del masaje ayurvédico es reestablecer el equilibrio del organismo y mantener la salud física y mental, combatiendo así el estrés. Para ello toma en cuenta los puntos vitales del cuerpo llamados marmas.
Según la filosofía ayurvédica los dolores se producen por una obstrucción del flujo de los vasos que transportan el vayu (aire). Al frotar el cuerpo se produce calor y los aires se desplazan, reduciéndose las tensiones y aliviando el dolor.
El masaje ayurvédico actúa así sobre el sistema circulatorio, linfático, nervioso y energético pero no sólo eso sino que además es uno de los métodos más eficaces para luchar contra el envejecimiento de la piel, nutriéndola y purificándola a nivel celular.
Limpiar nuestra piel mediante la higiene diaria es necesario para eliminar la suciedad exterior y las células muertas acumuladas en la superficie, pero solamente la acción profunda del masaje puede eliminar los residuos celulares del «ama» que se depositan bajo las capas profundas de nuestra piel y son los responsables de la descomposición genética y el envejecimiento.
El masaje ayurvedico es también una poderosa arma contra el estrés ya que libera los canales de energía relajando y tonificando los músculos. Además, estimula las glándulas de la dermis para que se produzcan hormonas, entre ellas la serotonina, hormona relacionada con las emociones positivas. A nivel interno, actúa sobre el sistema linfático, el cual suministra los nutrientes a las células y elimina las toxinas y los deshechos del organismo, ya que el sistema linfático necesita de las contracciones musculares para dirigir el flujo linfático a los ganglios.
Muchas de las propiedades beneficiosas del masaje ayurvedico proceden directamente de la utilización de los aceites de hierbas, que sirven para relajarnos y nutrir la piel. Su preparación está hecha a base de esencias puras de hierbas diluidas en aceite orgánico o de ghee. Estos aceites también llamados aceites esenciales, son específicos para cada tipo de piel y tienen propiedades antioxidantes, antibacteriales y antiinflamatorias. Además presentan una densidad molecular similar a la de nuestra piel para penetrar fácilmente en ella (de hecho son capaces de atravesar los tejidos de la dermis en unos cinco minutos y tardan ocho o diez minutos más en introducirse en las restantes capas de la piel). Una vez que actúan, los aceites esenciales no dejan sensación grasa aunque se recomienda darse un baño después de la sesión para contribuir a la relajación muscular. El delicioso aroma de los aceites empleados en el masaje ayurvedico también tienen propiedades relajantes y antiestresantes.
Los científicos han descubierto recientemente que el masaje ayurvedico reduce la actividad de los radicales libres, uno de los factores desencadenantes del envejecimiento celular, el cáncer y las enfermedades cardíacas.
En resumen, los beneficios que aporta el masaje ayurvedico son:
- Mejora el funcionamiento del sistema circulatorio y linfático.
- Retrasa el envejecimiento
- Elimina los signos de fatiga mental y corporal
- Alivia contracturas
- Ayuda con los transtornos del sueño
- Tonifica la piel
- Sirve para relajarnos y llenarnos de energía
Un masaje para cada constitución o dosha
Según el ayurveda, existen tres biotipos de doshas o energías llamados Vata, Pitta y Kapha.
Masaje Ayurveda para Vata
Vata tiene una naturaleza fría y seca y una constitución delicada. Para este dosha están especialmente indicados los aceites esenciales a base de sésamo caliente ya que quita la rigidez muscular y alivia los dolores de la artritis. Otros problemas relacionados con Vata son la piel seca, el estreñimiento o la hiperactividad. Para ello se prepara un aceite especial a base de almendra, mostaza, ricino llamado Cola de Mahanarayan.
Los Vata tienen una estructura ósea delicada y tienden a ser sensibles emocionalmente por lo cual el masaje debe realizarse con menos presión de la habitual.
Otras hierbas empleadas para esta constitución son el cálamo (o Vacha, la más eficaz), jengibre, jyotishmati, Dashamula y regaliz. El Vata tiende a acumularse en las cavidades secas y huecas del cuerpo como el pecho, la pelvis y el colon. El aceite deberá aplicarse generosamente en estas partes del cuerpo para lograr la armonía.
Masaje Ayurveda para Pitta
Los individuos Pitta tienden hacia el calor y padecen enfermedades relacionadas con la inflamación, úlceras, diarrea, dolores de cabeza o erupciones cutáneas. Por ello se recomienda la aplicación de aceites de base fría como la oliva, el coco y el girasol y de fragancias frescas como la lavanda, el sándalo o el jazmín. También se usan hierbas frías como brahmi (gota kola), ushira (khus o vetiveria), polvo de sándalo y cúrcuma.
El masaje debe efectuarse con una presión moderada. Los lugares físicos de Pitta son el intestino delgado, el hígado y el bazo donde se acumulan las toxinas. Aceites esenciales fríos como rosa, sándalo y violeta pueden aplicarse en las sienes y la cabeza que debe mantenerse fría.
Masaje Ayurveda para Kapha
La constitución de Kapha es húmeda, la piel es más grasa de lo habitual y las personas bajo este dosha suelen padecer sinusitis, resfriados, obesidad y exceso de mucosidad. Para contrarrestar este problema se aplicarán aceites calientes y secantes a base de mostaza, almendra o sésamo. También son eficaces los aceites esenciales a base de eucalipto, alcanfor, alheña, cálamo (Vacha), bala, dashamula, jengibre y canela.
El masaje se aplicará de forma vigorosa y profunda ya que los individuos Kapha tienen una estructura ósea y una constitución fuerte. Las toxinas se acumulan en la zona del estómago, los pulmones y las articulaciones por lo cual es aconsejable realizar un masaje vigoroso en el abdomen para mantener hacer circular estos deshechos e impedir que se estanquen.